sábado, 6 de abril de 2013

                   Los Domingos de Resurrección


   Como bien me dijeron siempre en mi casa, una cosa era Dios y lo que nos había enseñado, y otra la Iglesia... soy hija de padres católicos, mi madre practicante y mi padre que dice que no quiere ver un cura ni de lejos el día que fallezca a menos que sea como D. José María, el cura obrero que sigue levando las riendas de la parroquia que nos corresponde desde que se mudaron a esta casa en 1968 (y de de decir que es un cura de los que ya no quedan, cercano a sus feligreses, que los ha ayudado hasta quedarse casi sin nada, humilde, buena persona... no tengo palabras...)

   El caso es que para mí, igual que para otra cotovía que en un momento del año pasado me dio mucho ánimos y vida a esta alma que no sabía donde estaba su norte, los Domingos de Resurrección en sí tienen un significado especial....

  Mañana hace un año exacto desde el Domingo de Resurrección de la Semana Santa del 2012, y ese domingo entró alguien en mi vida que me ha ayudado a encontrar la luz y a volver a encontrar ese norte al que no tenía muy claro cómo llegar.

   Te doy gracias Peque, ya sabes que no digo tu nombre porque no te gustan estas cosas... gracias porque me has ayudado a remontar un periodo muy oscuro, gracias por quererme tal y como soy, con mis risas, lloros, manías, ser una enciclopedia con patas, una pedante en ocasiones... gracias por tener paciencia y esperar a arañar ese escudo que llevaba puesto desde hace mucho y permitirme abrirme hasta el último de mis sentimientos.

   Mañana voy a volver a vivir ese Domingo, pero que sepas que contigo lo vivo todos los días.

   Te quiero Peque, y lo siento, ncesitaba gritarlo al viento.

martes, 2 de abril de 2013

El principio: La Cotovía

    La verdad es que no sé muy bien qué me ha llevado a poner por escrito mis reflexiones, mi manera de ver la vida... quizás sea que tengo la cabeza llena de pensamientos, de sentimientos, de barullo...
    Soy nieta de Carmen la Cotovía, e hija de Pepe, el ebanista y de Carmiña, la modista, la 4ª de 5 hermanos, y la que tiene el alma más llena de mar... ese mar que me da miedo, al que como buena gallega de ciudad de mar le tengo, ante todo, respeto...
    Ayer fué un día especial, la luz de mi vida, mi padre, cumplió 74 años, siempre decimos que el día que nació se dieron dos acontecimientos en España, terminó la Guerra Civil y nació mi padre... las dos cosas al tiempo no podían ser... :-)
    De él he aprendido la honestidad, el saber hacer bien mi trabajo, el sacrificio por y para los que quiero, y, sobre todo, que mi palabra es lo primero... y él lo aprendió de la mujer de la foto, que toda su vida trabajó, como se suele decir, como una burra, pero que para mí forma parte de esos domingos en los que, por las mañanas, tenía a mi padre para llevarme de paseo, ver fútbol, mimarme, a su manera rectada, pero siempre ahí, como sigue estando cada vez que lo necesito.

  Soy cotovía, como mi prima @susanaseoanedovigo y mi prima @mariadovigo ...

   Soy como soy... me río cuando tengo ganas, y hablo más con mis silencios que a parlanchina... y cuando algo me molesta me hundo en un silencio callado, serio, soy mar... mis enfados son como los temporales... asustan al llegar, pero queda un mar calmo y sin memoria cuando pasa...

  Otro día pongo algo más por escrito...